Hola, somos de Dolores y Gloria
Equipo de psicólogas feministas: apoyo psicológico desde una perspectiva de género
Andrea Rueda
M-28110
Graduada en Psicología por la Universidad Autónoma de Madrid (2010-2014), nada más salir de la carrera me formé como Sexóloga (2014-2016). Tuve la suerte de empezar a trabajar al terminar el grado, pero las condiciones laborales abusivas que sufrimos las psicólogas me llevaron a tomarme una pausa después de dos años haciendo psicoterapia casi sin descanso. Decidí que mi objetivo era emprender y que para ello necesitaba dinero. Así que cambié de sector con el objetivo de crear mi monedero propio. Por el camino me crucé con el feminismo de la mano de dos grandes amigas que hoy siguen siendo compañeras en el mirar de cara a las desigualdades que sufrimos las mujeres en este sistema. Primero me enfadé y luego la rabia me llevó a conectar con la importancia de unir psicología y feminismo. En 2021 lo tenía claro, necesitaba lanzar mi proyecto personal sólo para mujeres. Me formé en Salud Mental Perinatal (2022) con el convencimiento de que la (no) maternidad sería algo con lo que necesitaba aprender a trabajar si me iba a pasar el resto de mi vida acompañando a mujeres. Y el círculo se cerró: en junio del 2022 nace De Dolores y Gloria. Un proyecto formado por psicólogas online dirigido solo a mujeres. Ese mismo año me formé en Feminismo y Psicoterapia con la Universidad de Barcelona, porque ser mujer y psicóloga te lleva a estar en constante formación.Graciela Vidal
C-28580
Graduada en Psicología por la Universidad de Vic (2015 – 2019), enseguida hice el máster en Psicología General Sanitaria (2019 – 2021). Ese mismo año empecé a trabajar en Cruz Roja como técnica social desarrollando proyectos con personas en riesgo de exclusión social. Fue mi primera experiencia laboral y la recuerdo con mucho cariño, en esta etapa descubrí mi capacidad creativa.
Lo compatibilicé trabajando en una residencia de mayores en la que se acompañaba a las personas desde la humanidad, la dignidad y el respeto. Ahí fue cuando abrí aún más los ojos a lo poco valorado que está el sector de los cuidados y a que, casualmente, la mayoría de personas que trabajan en ese sector son mujeres. Conecté con la rabia y la frustración.
En 2021 empiezo a hacer psicoterapia con mujeres y hombres, con la suerte de hacerlo de la mano de un equipo que trabaja con perspectiva de género. Entendí que ya nunca podría trabajar sin tener en cuenta el feminismo. Esto me llevó al Posgrado Feminismo y Psicoterapia de la Universidad de Barcelona (2022- 2023) donde conocí a Andrea y su maravilloso proyecto, De Dolores y Gloria.
Mar Suero
M-36454
Tras graduarme en Psicología por la Universidad de Cádiz (2012 – 2016) decidí trasladarme a Madrid para formarme como Sexóloga (2016-2018). Pronto fui consciente de la falta de perspectiva feminista que tenía mi formación y decidí continuar especializarme en prevención e intervención con víctimas de violencia de género (2018; 2020-2021).
Mientras estudiaba, tuve la oportunidad de colaborar con entidades como el Centro Joven de Atención a la Sexualidad, donde descubrí mi pasión por el diseño e impartición de talleres terapéuticos.
Enseguida hice el máster en Psicología General Sanitaria (2019 – 2021) y continué mi recorrido feminista trabajando con la Asociación de Mujeres Unidas contra el Maltrato (MUM), haciendo terapia con mujeres víctimas de violencia machista con pocos recursos económicos. Tras un par de años, decidí que quería continuar aportando en la otra cara de la moneda, por lo que en 2021 estuve colaborando con la asociación Con Un Pie Fuera (CUPIF), desarrollando e impartiendo programas de reeducación e intervención con agresores. Durante este año conecté muchísimo con la rabia y la frustración, pero también ejercité mis habilidades comunicativas y psicoeducativas (y mi paciencia).
Quise formar parte de un equipo de profesionales que me permitiera seguir creciendo y aportando en la lucha con la violencia contra las mujeres, y ese mismo año tuve la suerte de empezar a trabajar con un grupo de psicólogas especializadas en mujeres con el que continúo trabajando, y con el equipo de De Dolores y Gloria, a quienes seguía y admiraba en redes desde sus inicios.
A nivel profesional me caracteriza la cercanía, la empatía y el sentido del humor. Trabajo con una perspectiva integrativa y feminista, desde el ser y hacer conscientes a las mujeres que acompaño de la influencia que tiene el género en nuestra vida, de cómo gran parte de los malestares que sufrimos vienen derivados de las exigencias, expectativas y presiones que sufrimos por el hecho de nacer mujeres y no porque “haya algo mal en nosotras”.
A nivel personal me encanta viajar, hacer deporte, leer y estudiar, salir con mis amistades y cultivar mi autonomía y mi espacio propio.
Considero que el feminismo en sí supone, en primer lugar, un duelo, un despertar que nos invita a cuestionarnos nuestra identidad, nuestro rol en la sociedad y todas aquellas ideas y expectativas de futuro que, creíamos, habíamos elegido libremente. Y como tal, no es un duelo fácil. Pero, por otro lado, creo que el feminismo también es salvación, no solo como herramienta de lucha y transformación social, sino como una nueva forma muy potente de autocuidado y amor propio.
En definitiva, mi objetivo no es otro que el de acompañar y guiar a mis clienta en su autoconocimiento ayudándolas a encontrar las herramientas necesarias para recuperar su equilibrio y bienestar.
AnAÍS PAREJO
AN-10741
Nunca tuve claro que quería ser psicóloga, pero siempre supe que mi vocación estaría vinculada con lo social. Mi primer acercamiento fue a través del ciclo de Grado Superior en Integración Social (2012-2014), donde descubrí el feminismo, una nueva mirada al mundo que me atrapó y desde entonces ha guiado mi desarrollo tanto personal como profesional. Este encuentro marcó el inicio de mi búsqueda constante de formación y aprendizaje en torno al feminismo y la justicia social. Al finalizar el ciclo, sentí la necesidad de profundizar en mis conocimientos para ofrecer una atención más completa y de calidad, lo que me llevó a estudiar Psicología en la Universidad de Jaén (2014-2018).
Durante la carrera, noté la falta de perspectiva feminista y de un análisis contextual en la enseñanza, lo que me impulsó a seguir formándome paralelamente en feminismo. Esta inquietud me llevó a participar en voluntariados con Cruz Roja, apoyando a mujeres víctimas de trata, además de crear una asociación de feminismo en un entorno rural y colaborar en proyectos de cooperación internacional.
Me considero una persona inquieta, siempre en busca de nuevas formas de ampliar mi visión y comprensión de las realidades sociales. Posteriormente, cursé el Máster en Psicología General Sanitaria (2018-2020), también en la Universidad de Jaén. Fue aquí donde descubrí las Terapias de Tercera Generación, particularmente la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT). Este enfoque, que despatologiza el malestar y ayuda a las personas a construir una vida valiosa, resonó profundamente conmigo, y me parecía bastante compatible con lo que venía explorando sobre feminismo. Decidí continuar profundizando en esta corriente, realizando un máster especializado en Terapias de Tercera Generación.
Encarna Rubio
M-22751
Licenciada en psicología por la Universidad Complutense de Madrid, y con una experiencia profesional de casi 20 años en diferentes campos de la profesión. Desde la universidad sentí un profundo interés por enfocar mi trabajo con y para las mujeres. Los avatares de la vida, a los que nos enfrentamos las mujeres, también han marcado durante mucho tiempo mi trayectoria profesional. Trabajé diez años en el sector social con infancia, adolescencia y familias en situación de riesgo y exclusión. Las mujeres eran el eje vertebrador de la intervención, porque somos, en todos los contextos y más los precarios, quienes sostenemos las familias y la crianza. En ese momento la interseccionalidad entre clase y sexo se hizo fundamental en mi trabajo.
He continuado y continuo mi formación, soy también diplomada en trabajo social e hice un máster en psicología clínica. Colaboré como voluntaria con diferentes asociaciones, Luz Casanova y Mujeres Unidad contra el Maltrato (MUM), que intervienen con mujeres supervivientes de violencia machista.
Después migré y viví cuatro años en Francia donde conocí otras realidades. Trabajé en dos asociaciones (Les Relais y Olympe de Gouges) vinculadas al acompañamiento y la atención psicosocial, en el caso de Olympe dedicada al trabajo solo con mujeres víctimas de cualquier tipo de violencia.
En mi vuelta a España, comencé con el acompañamiento terapéutico con personas con enfermedad mental severa. Esta etapa me ha hecho confirmar que las mujeres en estas circunstancias están aún más en riesgo y sufren grados inimaginables de violencia institucional. Toda esta experiencia me llevó a formarme como Experta en Malestares de Género. Introducir del todo la perspectiva feminista en el acompañamiento terapéutico ha sido una fuerza impulsora para contribuir al bienestar de las mujeres con enfermedad mental severa.
Lo que más valoro en mi práctica profesional es la empatía y la capacidad para establecer vínculos sólidos con las personas que trabajo. Creo firmemente en la importancia de proporcionar un entorno seguro de apoyo y comprensión para favorecer el cambio. Enfoco mi trabajo desde una perspectiva humanista, integradora y feminista que permite comprender y abordar las complejidades de las experiencias de las mujeres, reconociendo y desafiando las estructuras sociales que perpetúan la desigualdad y el sufrimiento emocional en ellas. El feminismo es la pieza que hace que todo lo que no sabemos explicar y nos pasa a las mujeres en esta sociedad encaje. Explorar el malestar, ponerle nombre, sentir lo que nos provoca y poder elaborarlo es lo que como terapeutas feministas podemos ofrecer a las mujeres con las que trabajamos.